La evaluación psicológica es esencial en el campo de la psicología debido a que puede ayudar a identificar las condiciones de salud mental y otros problemas que pueden afectar los pensamientos, sentimientos y comportamientos de una persona.

Proporciona una comprensión más completa de las fortalezas y debilidades de una persona, lo que puede ser útil para tomar decisiones sobre el tratamiento y el apoyo.

Asimismo, se utiliza para medir un rango amplio de posibles patologías, por ejemplo, puede ayudar a diagnosticar condiciones como la depresión, la ansiedad, el trastorno bipolar, el trastorno por déficit de atención con hiperactividad (TDAH), entre otras.

La evaluación psicológica puede ayudar a las personas y sus familias a comprender mejor la naturaleza de sus luchas y las opciones disponibles para abordarlas.

En este sentido, un aspecto clave en la medición psicológica es contar con instrumentos que tengan adecuadas propiedades psicométricas. Esto se asocia con los datos obtenidos de la evaluación para determinar qué tan bien evalúa el constructo de interés.